Duele el amor

El amor duele y no lo digo sólo yo, lo dice todo el mundo. Lo puedes comprobar en el día a día en la sociedad, incluso en las películas, en las series. Quién no ha sufrido un desamor y ha sentido un dolor físico, como si realmente le estuviesen partiendo el alma. Quién no ha tenido una discusión, un mal día o un problema con la persona que más ama del mundo y ha sufrido tanto que ha sentido un dolor indescriptible y de esos que cuesta superar. Todo el mundo lo ha hecho y por ello me aventuro a escribir estas palabras, para decirte que el amor, a veces, duele.

Todos esos momentos vividos, todas esas risas, todos esos llantos, todos nuestros abrazos, nuestros besos, susurro y cariños nos vienen a la cabeza cuando más mal estamos, cuando peor lo estamos pasando porque caemos en la cuenta de que el amor es muy doloroso cuando no está de nuestro lado. Me duele mucho que estemos así de mal y tan sólo puedo esperar a recuperarte, a volver a estar tan bien como antes y dejarnos de penurias y de tantas lágrimas que derramamos casi a diario. No puedo seguir sufriendo de esta manera y necesitaba decírtelo, porque te necesito tanto o más que antes.

Sí, he escrito todo esto simplemente para decirte que el amor es lo más bonito del mundo pero también puede llegar a ser la cosa más dolorosa de la historia. Puede doler tanto como poner la mano en el fuego, como ahogarte en lo más profundo del mar, como un salto al vacío desde lo más alto del mundo o como un puñal en lo más hondo de nuestro corazón. Puede sentirse como un dolor real que a veces cuesta mucho de superar y que en ocasiones, nunca se supera. El amor duele, y espero que algún día consigamos salir de este pozo de dolor y podamos sólo ver lo positivo del amor, solo lo bueno, solo esa pasión tan bonita y tan divertida que sólo el amor es capaz de ofrecer. Te quiero, pero el amor, duele.