Ojos que no engañan

Cuando alguien se enamora con toda su alma,

la verdad, el cariño, la esperanza,

se convierten, de inmediato en su mejor arma.

Por eso quiero mirarte a los ojos, muy fijo

sin pensar ni un solo momento en nada más

por que para vivir la vida, te necesito a mi lado

contigo, todo lo demás me trae sin cuidado.

Tus ojos, tan profundos y oscuros,

sé que no me engañan, me miran con cariño,

y en lo más profundo veo tu alma,

tan limpia como la de cualquier niño.

Un beso de tus labios, lo más dulce

tus ojos, con una mirada preciosa,

me embelesan más que el perfume de rosa.

Juntos para siempre es como quiero estar,

noche, día, año tras año,

para tus dulces labios siempre poder besar.

Algo tan sencillo pero a la vez tan complejo,

una relación de amor,

en la que jamás aparezca el dolor.