Todas las cosas que callo

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Dicen que el hombre que está muy enamorado no es esclavo de las palabras, ¡y cuanta razón encierran todas estas palabras!, por que un nudo se cierra en mi garganta cuando quiero expresarte con total sinceridad todos los sublimes sentimientos que despiertas en mi corazón.

Por ese motivo, durante esta madrugada en la que ni por un solo segundo he dejado de pensar en ti, quiero dedicarte esta tierna carta de amor, para que sepas de una vez por todas que nuestros sentimientos nos unen más allá de lo humano, más allá de lo superficial, por que nos llevan directamente a un plano en el que tan solo importan nuestros latidos y poder besar tus dulces y tiernos labios al ritmo de estos.

Quizá te sorprenda que me haya atrevido a escribirte todas estas palabras de repente, pero créeme que era algo que llevaba queriendo hacer durante mucho tiempo, por que cada vez que te tengo cerca no puedo evitar pensar en todo lo que hemos compartido, en todos los momentos en los que has sabido comprenderme y estar a mi lado cuando nadie más lo hacía. Me has demostrado que estarás ahí para siempre, y que no habrá nada ni nadie que nos pueda separar, por que estaremos juntos más allá del tiempo y del espacio, sin condiciones.

Espero que sepas ver la gran sinceridad que impregna a estas palabras de amor, por que de una vez por todas quiero que descubras todas las cosas que callo y no te digo, te mereces saber los sentimientos que en mi despiertas.

Gracias por quererme, pese a todos mis errores, sé que tú comprendes que en ocasiones me puedo equivocar, pero siempre estás ahí para darme todo lo que necesito.

Gracias de todo corazón, te quiero y quiero estar siempre contigo.

 

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